Paulina Sánchez Román & Bernardo Pérez Franco
La corrupción es un problema que aumenta la incertidumbre y el riesgo en los países, disminuye los ingresos gubernamentales, reduce la productividad, y eleva los costos para el gobierno y las empresas; el Banco Mundial estima que la corrupción puede reducir la tasa de crecimiento de un país entre 0.5 y 1 puntos porcentuales por año; y, según las investigaciones del FMI, la inversión en los países corruptos es casi un 5% menor que en los países relativamente exentos de corrupción.
En este trabajo, pretendemos analizar el papel que desempeñan los medios de comunicación masivos en la capacidad de controlar o disminuir la corrupción. La pregunta que respondemos es cómo afecta la competencia y la libertad de expresión o la prensa independiente al control de los niveles de corrupción y si alguna tiene mayor preponderancia. Nuestra teoría es que los medios de comunicación masivos van a enfrentar la competencia haciendo énfasis en las noticias sobre corrupción, para lo que van a aprovechar la libertad de expresión con la que cuenten y van a denunciar actos de corrupción más efectivamente. Por lo anterior, los servidores públicos de los países con mayor apertura y competencia se van a disuadir de cometer actos ilícitos, pues el riesgo de ser sorprendido aumenta va. La libertad de expresión es lo que permite a los medios masivos ofrecer al público información constante y variada sobre corrupción, en forma de noticias, de columnas periodísticas, comerciales, etc., sin temer represión. Así, los niveles de corrupción van a disminuir en los países en donde los servidores públicos enfrenten mayores costos al cometer actos deshonestos en sus funciones.
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