martes, febrero 15, 2005

Stiglitz (1998): The Private Uses Of Public Interests: Incentives And Institutions

El autor propone cuatro hipótesis que pretenden explicar porqué no se pueden implementar o resulta difícil alcanzar mejoras de Pareto, o casi mejoras en las que sólo se afecten los intereses de un grupo limitado y bien determinado. Considera que los incentivos mal enfocados inducen a acciones que no satisfacen el interés público.
1. Incapacidad del gobierno para hacer compromisos creíbles. La incertidumbre de las necesidades futuras de la sociedad hace imposible que los compromisos de dejar estática cierta política sean creíbles, ya que las necesidades sociales pueden requerir cambiarlas en un futuro. No existe una institución que reprenda al gobierno por no cumplir sus compromisos. La Constitución es un compromiso porque hace costoso los cambios, sin embargo, por lo mismo es más difícil alcanzar mejoras de Parteo.
2. Las negociaciones hechas para implementar una política, se basan en información imperfecta creando equilibrios suboptimos. De igual manera, la sociedad cree que puede alcanzar mejores acuerdos, los cambios en la administración gubernamental refuerzan esa creencia por lo que los ya alcanzados no son implementados.
3. Todas las negociaciones para implementar una política se consideran de suma cero, aunque no lo sean, sometiendo a los políticos a una dinámica de competencia, disminuyendo los propios costos e incrementando los ajenos. Haciendo imposible mejores resultados.
4. La información imperfecta y privilegiada sugiere que la contraparte se está aprovechando en una negociación.
En general el artículo propone que si el gobierno fuera capaz de establecer compromisos: cooperara a través del dialogo y no de un debate, revelara toda la información, se tomara como prioridad los intereses públicos y no los privados, y se tomaran decisiones por consenso, se podría disminuir costos y problemas de los buscadores de rentas, y se podrían implementar mejores de Pareto.

1 comentario:

MaBz dijo...

El análisis me pareció netamente en términos económicos, dejando atrás argumentos políticos o sociales. Se centra únicamente en los incentivos, más allá de ideologías, por ejemplo. Intuye que todos anhelan el óptimo de Pareto, aun cuando algunos puedan pensar que es mejor una solución a la Robin Hood.
Stiglitz reconoce que las posturas teóricas que benefician a todos como el Pareto tienen dificultades al llevarse a la práctica. A pesar de eso, Stiglitz da una solución teórica al asunto sin ahondar sobre el por qué los actores que mantienen el status quo deben llevar a cabo sus últimas recomendaciones. No me quedo muy claro los incentivos por los que los gobernantes deben realizar lo que expone en su conclusión. Habla sobre el qué nos llevaría al óptimo sin indicar por qué los gobiernos deberían buscar revelar toda la información (por ejemplo).
Igualmente, me parece algo importante en su argumento algo que toma como secundario: el equilibrio de pareto es un momento instantáneo, mientras en el tiempo se hace insostenible. Esto debería ser únicamente sobre lo que girara la parte central de su primer y segundo argumento. Stiglitz sólo lo comentó, cuando a mi parecer eso resuelve gran parte de la pregunta planteada.